¿En qué debo fijarme para comprar carne en estas Fiestas Patrias? Esa fue la interrogante que esta mañana contestaron los secretarios de Salud y Agricultura, en el marco de una actividad educativa realizada en el Mercado de Antofagasta. Todo ello, con el propósito de proteger la salud de la ciudadanía en este nuevo aniversario patrio.
Manuel Herrera, Seremi de Salud (S), detalló que la carne debe ser rojiza y de consistencia firme. “Si está pálida, sin brillo o si se nota seca o con mal olor, no debe ser adquirida”, resaltó. Agregando que en cuanto a las carnes al vacío, es imprescindible fijarse en la fecha de vencimiento. El envase no debe estar dañado, y si está en bandeja, ésta debe estar limpia, libre de líquidos.
Por su parte, el Seremi de Agricultura, Pablo Castillo, comentó que el SAG fiscaliza durante todo el año el cumplimiento de la Ley de carnes, acciones que apuntan a tres aspectos fundamentales: verificar el origen y establecimiento de faenamiento; las categorías y los tipos de cortes de los productos cárnicos exhibidos en los establecimientos de expendios de carnes al público. Esto, con el fin de evitar confusiones e inducir errores en los consumidores, al momento de su compra.
Al respecto, la Directora Regional del Servicio Agrícola y Ganadero, Angélica Vivallo, precisó que, al SAG, le corresponde fiscalizar la procedencia de la carne, tanto nacional como importada, la nomenclatura de los cortes y la correcta tipificación de éstas. “Nuestros/as inspectores/as fiscalizan las entidades de certificación de la Ley 19.162, verificando el cumplimiento de la normativa vigente”, sostuvo.
Uno de los principales incumplimientos que se detectan en estas acciones casi siempre tienen que ver con infracciones al Decreto N°239 de Comercialización de Carnes Bovina, un ejemplo de aquello, es la exhibición en vitrina de los productos cárnicos sin rótulos en los cortes en venta, falta de anuncio de la categoría en venta y su procedencia.
Las autoridades de Salud y Agricultura coincidieron finalmente en la importancia de comprar en lugares establecidos, no en ferias libres ni en almacenes que no tienen las condiciones adecuadas de refrigeración, generando así un inminente peligro de contaminación.