Hasta el nuevo Terminal Rodoviario de Calama, ubicado en el sector sur de la ciudad, se dirigieron representantes de la Delegación Presidencial Provincial de El Loa, de las secretarías regionales de Bienes Nacionales y Obras Públicas, además del diputado Sebastián Videla, con la intención de fiscalizar el trabajo que se ha hecho y que realiza la empresa a cargo.
Luego de haber revisado el sector donde se pondrán las empresas, los andenes, los servicios higiénicos y la seguridad, la Seremi de Bienes Nacionales, Angelique Araya, reiteró que este proyecto “es una burla para Calama porque no era lo que queríamos, no era lo que esperábamos. Esto se generó pensando en ordenar la ciudad, en proyectar y darle un espacio de modernidad, y si embargo, no cumple con las expectativas, pero si tenemos que poner mano firme para que puedan salir los buses del centro”.
Por su parte, el parlamentario Videla, manifestó su molestia en contra de la empresa, “hace un par de meses yo vine acá cuando varias personas me contactaron, y me di cuenta que este proyecto estaba abandonado. Hoy, ni siquiera tienen los documentos que han presentado supuestamente a la municipalidad. Yo me he contactado con la ministra de BBNN y el lunes a primera hora me voy a reunir con ella para tratar justamente este tema”.
“Creo que ver una imagen donde había un proyecto, y ver algo distinto, me preocupa mucho, acá hay recursos de todos los chilenos que se han ocupado. La empresa no debería seguir porque lo ha hecho mal, se deberían ver otros mecanismos para que esto se pueda terminar de buena manera, y me causa mucha preocupación que no esté un gerente, un encargado o un responsable con los documentos”, agregó el congresista.
Finalmente, Miguel Ballesteros, Delegado Presidencial Provincial de El Loa, se refirió a la excusa puesta por la empresa, quienes argumentaron que la pandemia y la construcción de la nueva carretera influyó en la demora de los procesos, “la obra se adjudicó el 2014 y la ruta B-21 se comenzó a construir el 2021. Ese solo antecedente da cuenta que no es una razón para emplear los cambios que ha tenido el proyecto original”.