La cifra de nuevos casos de cáncer infantil en todo el país se ubica en 500 casos cada año, de éstos, cerca del 40% son leucemia y se estima que un alto porcentaje de estos pacientes oncológicos, van a requerir trasplante de médula. Es por este motivo que la doctora Tamara Inostroza, Jefa de Oncología Infantil del Hospital Regional de Antofagasta, asegura que cada año se hace necesario que crezca el registro de voluntarios para convertirse en donantes de médula ósea ya que esto aumentaría las posibilidades de compatibilidad entre los pacientes receptores.
Algunos programas de cine y la televisión se han encargado de recrear de forma alarmista el proceso de extracción o donación de médula ósea, sin embargo, dicha representación cinematográfica discrepa mucho de la realidad de este procedimiento médico que ayuda a salvar vidas en cualquier parte del planeta.
“Nosotros hemos adherido a la organización DKMS, una fundación sin fines de lucro con presencia a nivel mundial, para poder ayudar a aumentar las posibilidades de que los antofagastinos puedan ser donantes o receptores de médula. Este registro de potenciales donantes es muy sencillo y consiste en inscribirnos en la página web https://www.dkms.cl/es y posteriormente seremos contactados por la fundación, nos harán llegar un kit de muestras a nuestras casas y allí podremos recoger nosotros mismos las muestras a través de 3 cotones que pasaremos por la mucosa interna de nuestras mejillas, luego los introducimos en el sobre y lo sellamos de acuerdo a las indicaciones recibidas y finalmente depositamos esos sobres en los buzones que están habilitados para tal fin en el Hospital Regional de Antofagasta y en la Universidad de Antofagasta”, explicó la hematóloga.
De acuerdo con la especialista, cualquier persona entre los 18 y los 55 años podría ser un potencial donante de médula ósea, además, la jefa del servicio de oncología infantil del centro asistencial aclara que este procedimiento no es una donación de médula espinal, tampoco es un procedimiento que tenga graves consecuencias o repercusiones para los donantes: “una vez que DKMS analiza las muestras enviadas por sobre, el registro mundial verificará si existe compatibilidad con algún receptor, y en caso de ser positivo, la misma fundación correrá con todos los gastos de traslado a la ciudad de Santiago, fármacos y exámenes definitivos. Al momento de concretar la donación, el procedimiento de bajo riesgo es muy similar a una donación de sangre, no es una cirugía, y luego de la donación, el donante puede continuar su vida con normalidad y sin necesidad de licencia médica de recuperación”.
La Dra. Inostroza confesó que, en la actualidad, a nivel mundial la probabilidad de encontrar un donante de médula ósea compatible con un receptor es menor al 1%, y esto en gran medida podría superarse aumentando el registro voluntario de posibles donantes. Asimismo, la médica oncóloga puntualizó que todo el proceso es voluntario, es decir, aunque usted sea contactado y notificado de que existe alguna compatibilidad con un receptor, la donación final dependerá exclusivamente de la voluntad del donante, es decir, aunque exista compatibilidad entre donante y receptor, la donación no se concretará de forma obligatoria sino voluntaria por parte del usuario registrado.
Ante cualquier duda o consulta, cualquier persona puede ingresar a la página web https://www.dkms.cl/es y allí encontrará toda la información que requiera. De igual forma, la fundación ha habilitado los números de teléfono +562 2605 1464 / +562 2605 1465 para atender a las personas interesadas en cumplir el proceso de registro.