Como parte de su Plan de Manejo Ambiental de la Vertiente 11 en el Salar de Ascotán,
Minera El Abra logró el primer replante de las especies Zameioscirpus Atacamensis y
Puccinellia Frigida, nativas de esta zona, un paso importante hacia la recuperación de la
biodiversidad de este sector andino.
El trabajo, que también incluye el uso de un invernadero que se construyó a 3.700 metros
de altura, forma parte del Plan de Manejo Ambiental de la Vertiente 11 que realiza Minera
El Abra desde hace más de 10 años, el cual permite mantener un monitoreo permanente
de las condiciones bióticas y abióticas, para la recuperación de la biodiversidad de la
zona, como parte del Plan de Desarrollo Sustentable de la compañía.
El invernadero comenzó su funcionamiento en noviembre de 2020 y actualmente alberga
más de 1.300 ejemplares en estado vegetatito y varios miles en forma de semillas para su
proceso de germinación, con lo cual se busca aumentar la cobertura vegetal de la
vertiente. Esta labor la realiza la Gerencia de Medio Ambiente con representantes de las
comunidades de Ascotán y Ollagüe, contando además con la supervisión técnica de la
empresa Teknoriego.
Cabe destacar que durante el año pasado se firmó un acuerdo con las comunidades
indígenas de Cebollar-Ascotán y Ollagüe para reforzar el proyecto que se realiza de
manera conjunta de protección y restauración de la Vertiente11 en el Salar de Ascotán. Si
bien desde 2016 se trabaja con estas comunidades, en el 2020 se incluyeron medidas
adicionales para una mejor conservación del entorno.
Mauricio Anza Cruz, representante de la Comunidad de Ollagüe, quien forma parte de
este trabajo de recuperación de la Vertiente 11 señaló que como comunidad siempre han
valorado el trabajo de limpieza y replantación. “Para mí es muy valioso recuperar lo que
nosotros teníamos acá. Por parte de la empresa nos toman en cuenta y como persona
nos genera un trabajo que ojalá no termine acá, que sigan dándole más visión a estos
bofedales”, expresó.
Esther Quispe, representante de la comunidad de Cebollar-Ascotán que trabaja junto a
Teknoriego, destacó que: “mi experiencia ha sido buena, estamos aprendiendo muchas
cosas, lo cual es bueno y nosotros también compartimos parte de nuestra experiencia”.
Esther lleva cerca de 5 años trabajado en la Vertiente 11 y hoy en esta nueva labor de
replantación destacó que “al ver estas plantas, y que podamos ver el salar en un par de
años más como antes, esa es la idea, trabajar acá y ver la recuperación del salar, es
importante para nosotros como lugareños”.