Chuquicamata protagoniza uno de los desafíos más importantes de su historia, una transformación cultural en la que las mujeres juegan un rol fundamental en la conformación de equipos mixtos que entreguen un nuevo valor a la división, reto que con un profundo compromiso asumió el primer grupo de Aprendices que se integra a la Mina Subterránea.
“Es relevante para la organización, para la división y para la Corporación, porque estamos convencidos que el ingreso de mujeres es una necesidad en el cambio que queremos con la transformación de Codelco”, comentó la directora de Integración de la Gerencia Recursos Humanos, Paola Ramírez.
Después de meses de instrucción teórica y esperando que las condiciones sanitarias permitieran un seguro acceso a faena, se concretó el ingreso de estas jóvenes mujeres, quienes en esta primera etapa estarán distribuidas entre las superintendencias de Operaciones y Chancado, áreas donde deberán adquirir diversos conocimientos y habilidades.
En este marco, el superintendente de Chancado y Manejo de Minerales, Rodrigo Madrid, manifestó que la misión es conformar equipos que tengan un alto compromiso y desempeño, labor en que la presencia femenina es primordial. “Es un paso fundamental para este Chuquicamata que se transforma. Todos estamos conscientes que los equipos mixtos generan mejores resultados, con mayor desempeño, entonces es un paso necesario, sobre todo en un proyecto nuevo como el nuestro, que tiene que partir con equipos de alto desempeño”, argumentó.
Representando a las mujeres
Este programa integró a 30 jóvenes, que tienen entre 18 y 24 años y son en su mayoría de Calama, todas egresadas de liceos técnicos, de centros de formación técnica y de Inacap.
Nicol Salinas (24) es una de las Aprendices, quien estudió técnico en Metalurgia y antes de su ingreso a la mina contó que esperaba con ansias que llegara este momento y “ahora por fin lo estamos viviendo. Representamos a varias mujeres mineras que quisieran estar en esta instancia, somos las primeras aprendices en entrar a la Subterránea, entonces marcamos un hito importante en este sentido”.
Sentir que compartió la egresada de ingeniería en Metalurgia, Camila Galleguillos (23), al precisar que “para mí es muy relevante este hito, porque vamos a desarrollarnos de diferente manera, si ya aprendimos algo sobre minería esto será nuevo. Significa algo muy valorable”.
Raquel Chávez (22) estudió Construcción y Metálica y este año está cursando técnico en Minería y su interés en ser parte de Aprendices nació cuando fue estudiante en la división. “Postulé porque hice el dual acá en Chuquicamata y me gustó cómo enseñaban y motivaban los maestros. Bajar a la subterránea es un desafío, porque no nos iremos a enfocar en un área, sino que participaremos en varios procedimientos. Yo voy a dar lo mejor de mí, demostrar que sí puedo y que quiero estar acá”, enfatizó.
En tanto, Catalina Aguilera (24), quien es técnico en análisis químico, llegó cargada de motivación, compromiso y sueños por cumplir. “Me dio una alegría y satisfacción saber que logré quedar. Venía un desafío más grande que era dejar atrás a la familia, la comodidad de tener todo, pero tenía que hacerlo. Es un desafío muy grande, porque nunca he entrado a una mina subterránea y estoy muy motivada, quiero conocerla y todas las funciones que se hacen adentro”, contó la joven aprendiz.
Estas cuatro mujeres forman parte del primer grupo de Aprendices en ingresar a faena, el segundo equipo lo hará en el siguiente turno, ingreso que marca un hito en la Mina Subterránea y que se une al que ya hicieron las cuatro jefas de turno. Instancias que relevan el espíritu de la división de entregar oportunidades de crecimiento, de trabajo en equipo y de valorar el compromiso personal, todo enfocado en la misión de posicionar a Chuquicamata como líder en competitividad, sustentabilidad y en la generación de excedentes para el país.