Este jueves se concretó la clausura de dos recintos clandestinos en Calama. El primero de ellos ubicado en el sector del oniente, conocido como “Vilma Vilmita” donde funcionaba un local de venta de comida sin autorización sanitaria y expendio clandestino de alcohol. El segundo, operaba clandestinamente como discoteca en un motel del sector Avenida La Paz, conocido como after “Señor de la Noche”.
Tras una fiscalización realizada a este último por Carabineros, a través de la Sección de Investigación Policial (SIP), se comprobó que en el lugar se desarrollaban actividades nocturnas con venta de alcohol sin los permisos requeridos. Aunque el recinto operaba con fachada de hospedaje, se logró constatar que en realidad funcionaba como un “after”, lo que representa una modificación de giro no autorizada. Si bien estaba registrado como motel, en la práctica se había transformado en un centro de fiestas clandestinas que generan focos de inseguridad.
Durante la mencionada fiscalización, personal de la SIP verificó el expendio irregular de alcohol y constató la presencia de más de 70 personas al interior. En esa oportunidad, se realizaron 36 controles de identidad y se cursaron 6 infracciones, entre ellas por infringir la Ley de Alcoholes N°19.925, operar con un giro no autorizado y ocultar bebidas alcohólicas ante la presencia policial.
El delegado presidencial provincial de El Loa, Miguel Ballesteros explicó que “en esta jornada hicimos una doble clausura, una en el sector poniente, en un local denominado Vilma Vilmita, en el sector de las parcelas, donde no solamente se comercializaba alimentos sin autorización, faenando animales por lo demás, sino que además también había expendio clandestino de alcohol. Y posteriormente nos dirigimos al sector oriente de la ciudad, donde constatamos y logramos concretar finalmente la clausura de este motel denominado Paraíso, que además funcionaba yoperaba como un after de acuerdo a los informes de Carabineros.”
Cabe recordar que, en el 2022, este mismo recinto fue escenario de una grave balacera que dejó como resultado una persona fallecida y cinco heridas, hecho que remarca el riesgo que implica permitir el funcionamiento de estos espacios fuera de norma y sin fiscalización adecuada.
La autoridad clarificó que “hace un par de años un homicidio igualmente, y contábamos con una serie de denuncias que fueron constatadas por Carabinero hace un par de semanas en una fiscalización que efectivamente logró corroborar que se operaba con giros distintos al que tiene este local”.
Estas clausuras se suman a otras 31 ejecutadas en la provincia, totalizando 33 locales cerrados por la Delegación Presidencial, entre recintos clandestinos y aquellos con patentes, pero que igualmente fomentaban incivilidades y alteraban la convivencia vecinal en los sectores donde operaban.