Sabido es por los habitantes de la región de Antofagasta, las largas distancias que se recorren entre una comuna y otra, a lo que se le suma que en varios kilómetros, no se cuenta con señal, siendo un problema en caso de emergencia.
Sobre esta temática, Jorge Cortés-Monroy, seremi de seguridad pública, expresó que “nosotros tenemos un desafío que lo hemos planteado, que lo hemos presente a nivel regional y nacional, que es necesario terminar con las zonas de silencio que tiene la región. Lo vivimos cuando fue la emergencia de la CH-27 y quedaron personas atrapadas en la ruta”.
“Se envió una patrulla de Carabineros, que fue la primera para ver la situación en la que se encontraban, y ese vehículo no tuvo comunicación permanente con la base, entonces lo que hemos planteado es resolver el problema que tienen quienes participan fundamentalmente en actividades de rescate y seguridad”, agregó.
Este problema también se presentó en la ruta 5 (cerca de Taltal), donde meses atrás se volcó un bus, “desde que se dijo del accidente y que llegara carabineros al lugar, y después poder informar las necesidades, lo que se requería, etc., era necesario transitar alrededor de 50 kilómetros para tener comunicación y dar aviso”.
“Entonces, esas zonas de silencio, no son una realidad, por lo que esperamos que el desarrollo de proyecto de doble vía entre Caldera y Antofagasta culmine con esas zonas de silencio”, cerró.