La escuela básica D-49 Vado de Topater, en conjunto a Codelco distrito Norte, inauguraron una pérgola con asientos y mesas para los estudiantes, quienes podrán disfrutar y usar el espacio para estudiar, comer y conversar protegidos del sol y las altas temperaturas.
Pedro Leiva, director de la Escuela Vado de Topater, señaló que “esta inauguración está directamente relacionada con la posibilidad que nuestros estudiantes generen clases al aire libre y además, estas clases están conectadas con un kiosco lector en el cual se recibe material para trabajar en estas pérgolas”.
La escuela cuenta con un “Kiosco Lector”, ubicado en un área verde justo al lado de la pérgola, que está dispuesto de una serie de textos, libros y revistas que los estudiantes pueden solicitar y leer en los espacios que se han construido para ellos, con el objetivo de fomentar la lectura y aprendizaje en un entorno apropiado.
“Esta es una escuela que posee mucho cemento por lo que necesitamos compatibilizar el ambiente, irla mejorando para hacerla mucho más acogedora para nuestra comunidad escolar”, agregó el director del establecimiento.
A su vez, Daniela Gacitua, profesora de ciencias de la Escuela Vado de Topater, complementó que “este proyecto nace también con el propósito de proteger a los niños del sol frente a este cambio climático. La exposición del sol a los niños es bastante intensa en la escuela, ellos juegan todos los recreos y está en constante exposición”.
La inauguración de esta pérgola está contemplada en el marco del proyecto Desarrollo Ambiental en Escuelas y Liceos de Comdes, financiado por Codelco Distrito Norte y contempla la creación de diez espacios que potencien el cuidado del medio ambiente y un entorno agradable para los estudiantes.
Francisca Segura, coordinadora Extraescolar de Comdes, recalcó que “este es el tercer proyecto que estamos inaugurando, empezamos con la pérgola multitemática de la Escuela 21 de mayo, con fines ambientales, donde tienen varios elementos para hacer jardinería y plantar y la escuela D-32, donde ellos adquirieron material de reciclaje para crear planes de reciclaje entorno a ello y terminamos con la Escuela Vado de Topater con objetivos pedagógicos y de protección contra el sol”.
Actualmente ya se inauguraron espacios en tres de los diez establecimientos que estipula el proyecto, en el que se dispuso un monto aproximado de 10 millones para cada uno.