La Corporación Municipal de Desarrollo Social junto con la Cámara Chilena de la Construcción realizaron una alianza para crear un espacio educativo para los alumnos de la escuela “San Francisco de Chiu Chiu”, el cual recuperaron un espacio donde implementaron bancas y libros, además de la creación de un mural para transformar el lugar para que los estudiantes tengan un espacio adecuado para su desarrollo lector.
Felipe Armijo Ampuero, director de educación de Comdes, mencionó que “nosotros como corporación estamos muy agradados por estas alianzas que se están generando con la Cámara Chilena de la Construcción, más específico con la escuela “San Francisco de Chiu Chiu” de la creación de esta habilitación del patio lector, que más bien es una recuperación de un espacio de la escuela con un mural, con nuevas bancas para los niños, sembraderos, y también el rincón lector para que se pueda fomentar este hábito a todos los estudiantes del establecimiento”.
De igual forma, este es un trabajo que se está desarrollando durante un tiempo, el cual se finalizó cercana a las fiestas para que los estudiantes celebren esta inauguración con actividades.
María Yolanda Achiardi, vicepresidenta de Gestión de la Cámara Chilena de la Construcción sede Calama, expreso que “todo empezó cuando se formó la comisión hace un par de años atrás, quisimos ir en apoyo a la comunidad, partimos con un proyecto de capacitación con oficios de la construcción para mujeres vulnerables y, junto a eso, nuestra idea era apoyar a los niños, por eso vinimos aquí a la escuela, conocimos a la directora y supimos la situación de muchos niños acá, dijimos que mejor que hacerles una fiesta navideña para que participen y tengan un fin de año bonito”.
Este espacio fomenta la lectura y aporta directamente al desarrollo lector de los alumnos de una forma divertida y recreativa. Nieves Marín, directora de la escuela “San Francisco de Chiu Chiu”, dijo que “agradecer la gestión de la comisión de mujeres de la Cámara Chilena de la Construcción, quienes visualizaron una necesidad que teníamos como escuela, que era contar con un patio lector, donde se fortalece y potencia la motivación por la lectura. Sin duda, en los recreos van a tener otro fin, se van a desarrollar de otra manera porque el niño va a tener un libro a su alcance, va a tener un espacio más lúdico, más recreativo, entretenido”.