A primera hora del jueves 22 de octubre de 1868, una delegación de cuatro selectos dignatarios bolivianos subieron a un carretón tirado por mulas en el extinto puerto de Cobija y emprendieron rumbo a fundar un microscópico puerto que terminará por convertirse en la ciudad de Antofagasta, 128 kilómetros más al norte.
La mañana era tórrida. Los dignatarios vestidos de frac llegaron completamente sudados y exhaustos a la ceremonia de fundación de la entonces caleta conocida como La Chimba, cuyos primeros habitantes modernos se habían asentado hace apenas un par de años antes, de la mano del cateador quillotano Juan “Chango” López.
Según el medio de historia pampina Don Caliche, el libro “Narraciones Históricas de Antofagasta” del investigador Isaac Arce Ramírez rescata que “una comisión oficial boliviana, presidida por el Prefecto de Lamar don José R. Taborga y compuesta de los funcionarios públicos señores: Calixto Vizcarra, tesorero público de Mejillones, Abdón Senén Ondarza, fiscal de Partido y Agustin Vidaurre, notario de Hacienda, se trasladaron desde Cobija hasta el punto de la costa en que se encuentra hoy la ciudad de Antofagasta, con el objeto de proceder a la fundación de la Aldea”.
Para ese entonces presidía Bolivia el mandatario Mariano Melgarejo. Una hipótesis del porqué fue bautizada la entonces caleta como Antofagasta dice que fue propio Melgarejo quien decidió ese nombre, ya que poseía propiedades en una zona denominada “Antofagasta de la Sierra” en el norte de Argentina.
EVENTOS ANTERIORES
Antes de la fundación, Antofagasta era considerada una zona relevante para algunos. Como citamos anteriormente, Juan López, proveniente de Copiapó, ya se había asentado en el litoral, pues se encargó de explorar la capital regional hasta el puerto de Cobija, desembarcando en Puerto Jara en 1845 y en 1862, gracias a sus expediciones, descubrió yacimientos de guano rojo. Dos años más tarde, se radicó de manera definitiva en la caleta de Peña Blanca lo que hoy es conocido como el sector de La Chimba, al igual que José Santos Ossa.
Meses antes de la fundación de Antofagasta, un maremoto azotó a gran parte del litoral. Galeno (2018) destaca que el evento “asoló los principales asentamientos del norte chileno. Arica fue la más afectada, pero Iquique fue arrasado, así como la boliviana Cobija, mientras que la incipiente Antofagasta se fundaría meses después”.
“Antofagasta es la ciudad puerto más joven del actual norte chileno. En 1866 se asentaron los primeros exploradores mineros y meses después del gran terremoto fue fundada, el 22 de octubre de 1868. El auge de la plata y luego del nitrato, hasta su crisis en 1930, produjo migraciones que desde un principio conformaron una sociedad cosmopolita”, narra Galeno en su estudio “Iquique y Antofagasta en los Desiertos de Tarapacá y Atacama: Revolución Industrial, Damero y Vulnerabilidad”. Por ello, la ciudad comenzó a expandirse con la llegada de trabajadores y diversos empresarios seducidos por las riquezas de la zona.
ORIGEN
Conocida anteriormente como La Chimba, esta efeméride poco destacada tiene ricos antecedentes históricos sobre esta fecha.
Jaime Alvarado, periodista, detalló en la edición de El Mercurio de Antofagasta que “En esa memorable ocasión se fundaba, a las 2 de la tarde, en el desembarcadero de La Chimba, esta nueva población costera. La orden provino desde el altiplano, con la firma del general Mariano Melgarejo, presidente provisorio de la República de Bolivia, Benemérito de la Patria en Grado de Heroico y Eminente. En la ocasión se determinaba que habrá un ancla, como distintivo en el cerro más prominente, para señalar en el mar el punto de desembarque de los buques, indicando que es el lugar donde residen las autoridades del Supremo Gobierno Boliviano”.
El tarateño, de quien hemos dedicado palabras en Don Caliche; cuatro años más tarde, definiría el nombre de la actual ciudad. Antofagasta es homenaje a Antofagasta de la Sierra (conocida también como “La antesala del cielo”), ubicada en la Provincia de Catamarca en Argentina y donde el hijo del Mandatario poseía terrenos en esta ciudad, a la que el Melgarejo mantenía cariño.
¿Y qué significa realmente el nombre de Antofagasta? El diario El País de España destaca que significa “salar grande” en aimara, mientras que otras teorías indican que significaría “ciudad del gran tesoro” en quechua. Otros indican que se debe a los conquistadores españoles quienes la designaron como “flor de la costa”, y otros indican que provendría de los atacameños “lugar donde el sol se esconde”.
EFEMÉRIDES
Pese a lo anterior, la ciudad celebra su día de aniversario el 14 de febrero, fecha en la que el territorio fue anexado a la soberanía nacional en lo que fue el inicio de la Guerra del Pacífico, en 1879.
También se cree que un hito principal en la historia de la ciudad fue cuando Juan López levantó la primera vivienda, un día de octubre de 1866. También se apela a la configuración de la municipalidad en enero de 1872. Pese a lo anterior, Isaac Arce remata que “De esta manera, el insignificante villorrio se iba transformando como por encanto; y los esfuerzos que hacía por darse luego a conocer como verdadero pueblo no eran del todo estériles, pues en breve atraería la atención del mundo”.