Son 96 los alumnos y alumnas de las localidades de San Pedro de Atacama, Toconao, Socaire, Río Grande, Camar, Peine y Talabre, quienes recibieron sus certificados de estudios básicos y medios, tras finalizar con éxito el Programa Nivelación de Estudios 2021, que busca fomentar la continuidad de la educación en personas que no pudieron concretar su escolaridad.
La iniciativa -que se desarrolló por cuarto año- es el resultado del trabajo en conjunto desarrollado por la Ilustre Municipalidad de San Pedro de Atacama, a través de su OMIL, junto al apoyo de SQM, Fundación La Semilla y la OTEC Capacitaciones Da Vinci.
“Queremos felicitar y agradecer el esfuerzo de cada uno de los estudiantes que participaron de esta versión, en que, además, aumentó significativamente el número de personas que quisieron nivelar sus estudios y que hoy han podido cumplir con este gran desafío. Esperamos que esto incentive a otros vecinos a sumarse porque los estudios son importantes para acceder a nuevas posibilidades”, destacó el alcalde de San Pedro de Atacama, Justo Zuleta.
El vicepresidente senior de Servicios Corporativos de SQM, José Miguel Berguño, resaltó el alcance del programa, al sostener que “es una gran oportunidad y estamos orgullosos de ser parte de este gran trabajo colaborativo que permitió que 96 personas pudieran retomar y finalizar su enseñanza básica y media. La educación, que es un pilar importante dentro de nuestro modelo de desarrollo, abre muchas puertas y permitirá entregar mejores oportunidades a las personas para que sean protagonistas de su propio desarrollo”.
FORMATO VIRTUAL
La iniciativa se realizó en formato virtual, adaptado al contexto de la crisis sanitaria, una medida que, además, facilitó la asistencia de alumnos y alumnas de las localidades más alejadas, lo que permitió certificar a 58 estudiantes que obtuvieron su diploma de Enseñanza Básica, mientras que otros 38 se licenciaron de Educación Media.
Uno de esos casos es el de Lidia Martínez, de San Pedro de Atacama, quien logró certificar su enseñanza media y así, apoyar de mejor forma a su familia. “En mi niñez había estudiado hasta cuarto básico y por esto no le podía enseñar a mi hija. Ahora, que ya pude sacar el cuarto medio, me siento feliz y muy agradecida, porque ya no tengo miedo de apoyar a mi hija con sus tareas”.
Otro de los participantes es Francisco Terán, de la localidad de Río Grande, quien agradeció el apoyo recibido en el programa. “Tenía hasta sexto básico y con esto me siento motivado a seguir estudiando. Ha sido una muy buena experiencia para mí y mis compañeros, por eso quiero instar a otras personas a que también completen sus estudios y puedan lograr sus objetivos”.
Desde 2018, la iniciativa ha beneficiado a 301 personas de las distintas localidades del Salar, mejorando las competencias educacionales y calidad de vida de jóvenes y adultos de la zona.