Una nueva jornada de fiscalización se desarrolló en diversos puntos de Calama, cuyo objetivo fueron los locales establecidos en el centro de la ciudad y en puntos en el sector poniente, donde se contaban con denuncias de vecinos, alertando la presencia de puestos de comercio ambulante en espacios públicos.
En la oportunidad, se logró el desalojo de dos puestos que realizan comercio ambulante en el espacio público, específicamente en calle Colo-colo de la ciudad, logrando el decomiso y desnaturalización de 940 kilogramos de alimentos y productos de contrabando, tres sumarios sanitarios, tres infracciones municipales, seis trabajadores en informalidad laboral, 32 controles de identidad y 12 controles vehiculares.
Ante esto, el delegado presidencial provincial, Miguel Ballesteros, indicó que, “estos trabajos son para recuperar los espacios públicos ocupados por actividades comerciales irregulares, donde, no solamente se toman los espacios públicos, sino además comercializan productos de contrabando. Este es un trabajo enmarcado en la mesa de fiscalizaciones y que dice relaciones con las estrategias como el Plan Calle Sin Violencia, cuyos ejes van también de la mano con la recuperación de espacios públicos, para que así, la gente pueda recuperarlos y transitar de manera tranquila”.
Finalmente, la autoridad reiteró que este trabajo será permanente. “Existe una disposición permanente para desalojar estos espacios que vayan siendo ocupados de manera irregular”, cerró la autoridad.