Durante la jornada de este viernes, el presidente de la república, Gabriel Boric, llegó hasta la región de Antofagasta para lanzar la política nacional del litio, desde las Ruinas de Huanchaca, oportunidad que también aprovechó para referirse a la crisis de seguridad en Calama, anunciando la llegada de contingente policial y la incorporación de la comuna al plan “Calle Sin Violencia”.
Junto con expresar su preocupación por el aumento de la delincuencia y hechos de violencia en los espacios públicos de Calama, el mandatario señaló que el gobierno actualmente “está ocupado, con sentido de urgencia, en abordar los desafíos de la seguridad en Chile”.
“Entendemos, y empatizo personalmente con el temor y la angustia de los ciudadanos y ciudadanas, especialmente de las personas vulnerables, que son las principales víctimas de la delincuencia, del narco, que pretenden arrebatarnos los espacios que son de todos”, manifestó.
Al respecto, y en línea con la visita a Calama que realizó el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien se reunió con autoridades, policías y parlamentarios para analizar y revisar medidas prontas a implementar, Boric anunció la llegada de un contingente policial, a fin de reforzar el control de la violencia en las calles.
“¿De qué medidas estamos hablando en particular para Calama? La llegada de 26 nuevos funcionarios policiales, tres furgones Z, dos radiopatrulla, y un bus para fortalecer la labor de Carabineros y el control del orden público en Calama. Y este lunes llegan a la comuna, además, 10 funcionarios también de la PDI, y están especializados en la persecución de delitos violentos”, puntualizó.
El ejecutivo además subrayó que esta medida se suma a la incorporación de Calama, además de Antofagasta, al plan “Calle Sin Violencia”, el cual está pronto a ser implementado.
“Nos va a permitir una persecución penal más efectiva de los homicidios y delitos violentos, mayor presencia policial en el territorio, y sacar de circulación, muy importante, las armas ilegales irregulares”, sentenció.