Aurora es una bebé de tan solo 6 meses y desde que nació, no ha conocido el mundo exterior. Solo ha estado en el Hospital Regional de Antofagasta, primero en la UPC Neonatal y posteriormente en la UPC Pediátrica, esto debido a una serie de polimalformaciones con las que nació esta pequeña quien, tras más de 6 meses internada en el centro de salud, finalmente obtuvo el alta médica y pudo irse a casa con sus padres.
El caso de Aurora es tan solo uno de los tantos pacientes pediátricos críticos de alta estadía que requieren atención especializada en el Hospital Regional. Según explica la Dra. Benilmar Méndez, Intensivista Pediátrica y jefa (s) de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos, los niños que tratan en la UPC pediátrica normalmente pasan entre 6 y 12 meses continuos internados en el centro asistencial, en su mayoría por complicaciones derivadas de malformaciones genéticas o síndromes múltiples. Asimismo, estas malformaciones de las vías aéreas requieren ser tratadas de forma inmediata para ayudar a mejorar y alargar la vida de estos pequeños.
Es en este contexto que integrantes de la Unidad de Pacientes Críticos Pediátricos se percataron que los padres y familiares de estos pacientes carecen de registros visuales sobre el primer año de vida de sus hijos. “Los niños pasan mucho tiempo con nosotros durante su primer año de vida, y notamos que los padres no tenían registro de ese período, de cómo se alimentaban, como crecían, en fin, como superaban todos los obstáculos. Entonces, en el marco de un proceso de humanización de la atención hospitalaria, nos propusimos empezar a registrar mes a mes los progresos de nuestros pacientes y luego, cuando se van de alta, entregar un álbum fotográfico a sus padres, y hoy por hoy hemos hecho entrega del primer álbum a los padres de Aurora”, indicó Méndez.
Este libro o álbum fotográfico, que tomó por sorpresa a los padres de Aurora, tiene registros desde su primer mes de vida. En las fotos se observa el progreso de la pequeña paciente, los momentos en los cuales empezó a comer, a reír, entre otros episodios típicos de cada bebé. Los integrantes de la UPC Pediátrica del Hospital Regional de Antofagasta actualmente tienen más de 5 pacientes con casi 1 año de hospitalización, por lo que esperan entregar álbumes a todos sus familiares.
Kaynna Gómez, mamá de la pequeña Aurora, cuenta que, desde el 27 de enero, fecha en la que nació su primogénita, hasta la actualidad, fueron meses complejos para ellos como familia. “Estar alejados de ella ha sido muy difícil, sin embargo, gracias a la ayuda de la unidad y de sus funcionarios, lo hemos podido manejar. Nunca nos han puesto límites para las llamadas, siempre nos atienden nuestras inquietudes y también nos han dado apoyo psicológico”.
Gómez, al recibir el primer álbum fotográfico que preparó la UPC Pediátrica, manifestó no solo su sorpresa sino también agradecimiento. “Veo que hay fotos, dedicatorias, su nombre, muchas fotos que no esperábamos. Un lindo regalo para todos nosotros”.
Entre tanto, Fernando Caucota, padre de Aurora, señaló que a partir de este momento que se llevan a la pequeña a casa, se inicia una nueva etapa como familia. “Estoy muy feliz de que nuestra hija vaya a estar por fin con nosotros porque es algo que esperamos desde hace mucho tiempo. Mi mensaje a los padres de los otros niños que están en cuidados intensivos es que tengan fe y confianza en sus hijos, ellos son más fuertes de lo que imaginamos y debemos tener esperanza en ellos, son todos muy valientes”.
Finalmente, Kriss González, sicóloga de la UPC Pediátrica del principal centro de salud de la región, aseguró que este proyecto de entrega de álbumes fotográficos a los padres de los pacientes, guarda relación con un proceso transversal que tiene como principal objetivo la mayor humanización del trato y atención asistencial. González consideró que, debido a las restricciones de la pandemia, este registro visual ayuda a reducir las brechas de apego generadas por el contexto sanitario actual.
Opinión similar relata Constanza Vidal, enfermera clínica de la UPC Pediátrica, resaltó que el nexo entre padres y pacientes necesita ser reforzado con distintas estrategias durante el lapso en el que los pequeños se encuentran hospitalizados. “Nosotros también nos encargamos de entrenar a los padres y familiares sobre los cuidados que deberán seguir los pacientes una vez se van de alta a sus casas, para que puedan seguir evolucionando satisfactoriamente”.