población adulta presenta síntomas de reflujo gastroesofágico, Esta cifra pone de manifiesto la relevancia de una de las enfermedades digestivas más frecuentes, que impacta significativamente la calidad de vida de quienes la padecen, afectando tanto su bienestar físico como emocional.
La persistencia de estos síntomas puede limitar las actividades diarias, interferir con el descanso y, en casos más severos, derivar en complicaciones que requieren atención especializada.
En este contexto, el Dr. Ramón Díaz, cirujano digestivo de Andes Salud, quien estará atendiendo consultas médicas en la clínica el próximo viernes 21 de febrero, explica en detalle qué es esta condición, cómo identificarla y las opciones de tratamiento disponibles.
¿Qué es el reflujo gastroesofágico?
El Reflujo Gastroesofágico es el regreso de los jugos gástricos del estómago hacia el esófago, el tubo por el cual los líquidos y los alimentos bajan desde la boca hasta el estómago.
Esta enfermedad ocurre cuando el contenido del estómago regresa al esófago, generando molestias como acidez o regurgitación. “Esta condición puede manifestarse por síntomas clásicos, como ardor en el pecho, dificultad para tragar y sabor ácido en la boca, pero también puede asociarse con manifestaciones menos evidentes, como tos crónica o dolor de garganta persistente”, explica el Dr. Díaz.
Causas del Reflujo Gastroesofágico
Entre las principales causas se encuentran el sobrepeso, el consumo excesivo de alimentos grasos o ácidos, el tabaquismo y factores genéticos. “Estos factores pueden debilitar el esfínter esofágico inferior, una válvula muscular que normalmente impide que el contenido del estómago regrese al esófago”, indica el Dr. Díaz.
Además, hábitos como acostarse inmediatamente después de comer, llevar una dieta desequilibrada o consumir alcohol en exceso también pueden contribuir al desarrollo del reflujo gastroesofágico, afectando la calidad de vida de quienes lo padecen.
¿A qué tipo de personas afecta más?
Aunque puede presentarse en personas de todas las edades, el reflujo es más común en adultos mayores y en aquellos con estilos de vida poco saludables. “Es fundamental prestar atención a los factores de riesgo y adoptar medidas preventivas, como mantener un peso adecuado, evitar comidas copiosas antes de dormir y reducir el consumo de alcohol y cafeína”, destaca el especialista.
En casos más severos, donde los tratamientos médicos o cambios en el estilo de vida no son suficientes, se puede requerir de una cirugía de reflujo gastroesofágico. “La intervención quirúrgica está dirigida a reforzar la barrera natural entre el estómago y el esófago, ofreciendo una solución definitiva para quienes sufren de reflujo crónico”, explica el Dr. Díaz.
¿Cómo se diagnostica el reflujo gastroesofágico?
El Dr. Díaz indica que el diagnóstico del reflujo gastroesofágico puede incluir una combinación de métodos:
• Evaluación clínica: Basada en la descripción de los síntomas, como acidez o regurgitación, y en el historial médico del paciente.
• Endoscopía digestiva alta: Permite observar directamente el estado del esófago y descartar lesiones o complicaciones, como esofagitis.
• Monitoreo del pH esofágico: Mide la cantidad de ácido que llega al esófago durante 24 horas.
• Manometría esofágica: Evalúa la funcionalidad del esfínter esofágico inferior y la movilidad del esófago.
“Estos procedimientos ayudan a determinar la gravedad de la enfermedad y a identificar posibles complicaciones asociadas al reflujo crónico, como el esófago de Barrett, por ejemplo.”, agrega el Dr. Díaz.
Tratamientos disponibles
El tratamiento del reflujo gastroesofágico varía según la severidad de los síntomas y las necesidades del paciente. Las principales opciones incluyen:
• Cambios en el estilo de vida: Como perder peso, evitar alimentos irritantes (grasas, cítricos, cafeína) y no acostarse inmediatamente después de comer.
• Terapia farmacológica: Medicamentos como inhibidores de la bomba de protones (IBP) para reducir la producción de ácido estomacal, y antiácidos o bloqueadores H2 para aliviar síntomas ocasionales.
• Terapia Quirúrgica: En casos graves, donde los pacientes responden bien a la terapia farmacológica para el control de síntomas, pero el paciente tiene mucha regurgitación o no desea tomar fármacos por toda su vida, la terapia quirúrgica cobra relevancia.
“El manejo integral de esta enfermedad es clave para mejorar la calidad de vida de los pacientes y prevenir complicaciones futuras”, sostiene el Dr. Díaz.
Tratamientos disponibles en Andes Salud
En ese sentido, Andes Salud no solo cuenta con la experiencia del Dr. Ramón Díaz en cirugía digestiva, sino también con una moderna Unidad de Endoscopía y Colonoscopía, esencial para el diagnóstico preciso de estas patologías. “Es importante que los pacientes busquen atención temprana para evitar complicaciones, como lesiones en el esófago o incluso el desarrollo de patologías más graves”, concluye el Dr. Díaz.
Quienes deseen agendar una cita médica con el especialista para tratar esta y otro tipo de patologías del sistema digestivo, pueden hacerlo ingresando a la web institucional www.andessaludelloa.clo llamando al 600 401 2400 (Contact Center).