Una triste noticia recibió el mundo del fútbol chileno luego de conocerse la partida de José Sulantay Silva, por complicaciones de salud que se acrecentaron tras sufrir un accidente cerebrovascular el año pasado.
El “Negro” como era conocido, deja una huella gigante en el fútbol nacional, tanto como futbolista y posteriormente como director técnico, donde consiguió títulos con Deportes La Serena y Cobreloa, siendo, además, considerado como el padre de la generación dorada de la selección chilena, tras clasificar a dos mundiales Sub-20, en Países Bajos 2005 y Canadá en 2007.
Historia
José Sulantay Silva, nació en Coquimbo un 3 de abril de 1940. Debutó como futbolista en Deportes La Serena, jugando además en O’Higgins, Palestino, Antofagasta Portuario y Coquimbo donde se retira. En 1958 fue convocado a la selección chilena Sub-20 que participó en el sudamericano de aquel año, siendo también nominado por Fernando Riera en diversas ocasiones en la selección que se preparaba para el mundial de 1962, pero lamentablemente no fue convocado para disputar la fiesta mundialera en territorio nacional.
Internacionalmente, “Don Sula” jugó en Universidad de El Salvador y Atlético Marte de El Salvador; y en el Atlético Cobán y Aurora de Guatemala.
Tras su retiro como jugador, Sulantay se mantuvo en el fútbol siendo ayudante técnico en Coquimbo y Deportes La Serena, estrenándose como director técnico en 1980 en el equipo pirata, sumando luego, varios equipos chilenos a quienes dirigió.
Sulantay y el Cobreloa campeón 92
En 1992 llega Sulantay a Cobreloa tras realizar una gran campaña en Coquimbo Unido, donde salió segundo en el torneo tras el Colo Colo de Mirko Jozic, clasificándolo a la Copa Libertadores.
Así llega a un Cobreloa que buscaba volver a las celebraciones en el torneo nacional. Con los mineros hace historia logrando la marca de más partidos invictos en una temporada con 26, entre las fechas 4 a la 29.
En aquel equipo, contó con jugadores como Héctor Puebla, Leonardo Canales, Marco Antonio Figueroa, Fernando Cornejo, Pedro Jaque, Juan Covarrubias, Marcelo Miranda, entre otros grandes futbolistas que conformaban ese gran plantel y dirigido de gran manera por Sulantay.
Al año siguiente, disputa la Copa Libertadores dirigiendo a los mineros, llegando hasta los octavos de final en la competencia, cayendo ante Cerro Porteño y quedando en el segundo puesto del campeonato nacional tras Colo Colo.
Segunda etapa en Calama
En 2017 con un Cobreloa en una situación totalmente diferente a la que vivió, decide salir del retiro como técnico y define volver a Calama a dirigir a los naranjas en la Primera B, con la misión de tratar de hacerlo volver a la división de honor.
La tarea fue compleja, diversos problemas que llevaron a que no se consiguiera el objetivo por parte de los naranjas y apagando también de paso, las ganas de conseguir un nuevo éxito con los loínos y las ganas de seguir dirigiendo, ya que tras su paso por la capital de la provincia El Loa, no seguiría más en el fútbol.
Selección, generación dorada
En 2003 llega a la selección chilena invitado por Juvenal Olmos para ser su ayudante técnico que se preparaba para el preolímpico Sudamericano Sub-23 de Chile 2004, donde terminó en el cuarto lugar, teniendo jugadores como Claudio Bravo, Jean Beausejour, Humberto Suazo y Jorge Valdivia.
Tras el torneo, asumió el cargo de seleccionador de la Sub-20 obteniendo la clasificación al mundial en Países Bajos, tras salir en cuarto lugar en el clasificatorio realizado en Colombia, y alcanzando los octavos de final en la fiesta mundialera, cayendo ante el equipo organizador, pero que destacó por los nombres que aparecieron y que luego fueron figuras, como Matías Fernández, Carlos Carmona, Marcelo Díaz y Gonzalo Jara que marcaron diferencias.
En 2006 asume también la dirección técnica de la selección chilena Sub-17 participando en el Sudamericano realizado en Ecuador, donde quedó en la fase de grupos. Al año siguiente, liderando la Sub-20 nuevamente, obtiene el cuarto lugar en Paraguay que le dio el pase al mundial de Canadá donde consigue el tercer puesto tras derrotar al combinado austriaco, en una presentación que para muchos pudo haber sido mucho mejor, si es que no se pierde con la Argentina de Messi que finalmente fue la campeona.
En aquel torneo, surgen grandes nombres que son parte de la generación dorada, sumados a los jugadores que estuvieron en Países Bajos, como Gary Medel, Arturo Vidal, Alexis Sánchez y Mauricio Isla que fueron claramente puntales de aquel seleccionado, sumado a una actuación notable del golero Cristopher Toselli, quien, hasta el partido contra Argentina, no había recibido goles.
Por eso, por cómo creó ese equipo y cómo lo lideró, es que José Sulantay es considerado como el padre de la generación dorada, ya que fueron muchos los que siguieron a gran nivel y que terminaron celebrando las dos copas américas conseguidas en 2015 en Chile y 2016 en la Copa Centenario en Estados Unidos.
Huella
Claramente José Sulantay Silva dejó una huella en el fútbol chileno, muchas veces fue muy crítico del futbolista nacional, del manejo del balompié local, recibió muchas veces críticas, incluso una suerte de desprecio y el no reconocimiento de su trabajo conseguido, principalmente en la selección mundialista 2007, pero sí marcó una historia que es inolvidable y que los hinchas y simpatizantes saben y sabrán reconocer.
Se va una parte del fútbol y crece una figura que marcó a varias generaciones. Por eso y por mucho más, sólo hay que decir ¡Gracias por tanto profe!.