Tras una investigación en la planta piloto de almacenamiento térmico de la Universidad de Antofagasta, la cual buscó comprobar y validar los beneficios de usar una mezcla ternaria de litio, el ingeniero Mauro Henríquez Heimpeller se convirtió en el primer Doctor en Energía Solar de Chile.
El profesional se involucró en la temática energética en el año 2009, cuando ingresó al Magíster en Desarrollo Energético. Posteriormente, tuvo la oportunidad de perfeccionarse con una beca nacional en la Plataforma Solar de Almería de España. Paralelo a su desarrollo académico, se desempeñó como profesional de la empresa SQM.
El rector del plantel, Dr. Luis Alberto Loyola, manifestó la alegría y satisfacción institucional por el hecho, sosteniendo que “haber preparado y graduado al primer doctor en Energía Solar de Chile, constituye un gran logro, fruto del esfuerzo y compromiso de esta institución con el desarrollo científico y tecnológico mediante la formación del talento humano avanzado para la región”.
Tesis
La tesis llevó por nombre “Propuesta del LiNO3 como material de almacenamiento térmico solar: análisis tecno-económico de su aplicación en centrales CSP”.
En el estudio, el investigador propone una mezcla ternaria compuesta por LiNO3+KNO3+NaNO3 como alternativa a la actual mezcla binaria 60%KNO3+40%NaNO3 usada en los sistemas de almacenamiento térmico solar de las plantas de concentración solar de potencia (CSP), como, por ejemplo, la planta Cerro Dominador.
“Es una gran responsabilidad ser el primer doctor en Energía Solar. Además, esto me motiva más para estar a la altura de los cambios que debemos desarrollar, siendo parte del Centro de Desarrollo Energético de Antofagasta (CDEA). El gran desafío, es cambiar nuestra matriz energética por una más sustentable, incorporando desde la base la Energía Solar”, comentó a el flamante doctor Mauro Henríquez.
Doctorado
Respecto a sus estudios en el Doctorado en Energía Solar de la UA, el investigador señaló que los desarrolló como parte de un camino, el cual sostiene “aún estoy construyendo”.
“Gracias al Doctorado, conocí un mundo completamente distinto, que llena mi alma y me hace sentir vivo, permitiéndome aportar y crear un mundo mejor. Esa es la forma como decidí vivir la vida en los próximos años”, finalizó el investigador.
El doctor Henríquez a fin de 2015, se sumó al grupo de investigación del CDEA y al año siguiente se integró al Doctorado en Energía Solar, convirtiéndose en el primer graduado.
Actualmente, continúa siendo parte de ese centro y además es director del proyecto FIC-R llamado “Transferencia nuevo sistema de descomisionamiento de sales fundidas a alta temperatura para plantas con almacenamiento térmico solar”.