Tras estar durante 32 años entregando energía al Sistema Eléctrico Nacional, este viernes 30 de septiembre a las 23.59 hrs. ENGIE Energía Chile S.A. desconectará su última unidad a carbón del Complejo Térmico de Tocopilla (CTT).
Este hecho se enmarca en el compromiso voluntario que adquirió la compañía líder en la transición energética en 2018 al anunciar la salida de las unidades 12 y 13 de la CTT- cuestión que se llevó a cabo en junio de 2019-, únicas centrales en el país que ya han sido desmanteladas. Luego se continuó con la desconexión de la Unidad 14 el pasado 30 de junio y este viernes culmina con la Unidad 15, ambas del mismo complejo. Esto significa que en los últimos cuatros años ENGIE Chile habrá cerrado el equivalente a 440 MW.
“Cumplimos y reafirmamos nuestro propósito de actuar para acelerar la transición a un mundo carbono neutral. Cabe recordar que fuimos pioneros al dar inicio a la descarbonización a nivel nacional, la cual, en nuestro caso, ha ido acompañada de un proceso abierto, dialogante y participativo con los distintos actores involucrados a través de un Plan de Transición Justa”, comentó Axel Levêque, CEO de ENGIE Chile.
Este proceso de Transición Justa ha sido clave para llevar adelante la transición. “En ENGIE Chile estamos conscientes de que nuestra transformación conlleva impactos sociales para quienes trabajan en la compañía y también para nuestros vecinos. Las operaciones que van en retirada llevan décadas aportando al dinamismo de la economía local y, por ello, contamos con un plan en el cual participan nuestros colaboradores, los sindicatos, las comunidades y autoridades locales, entre otros. Este es un trabajo de día a día que no termina con la desconexión, porque somos parte del pasado, presente y futuro de Tocopilla”, agregó.
Con el cierre de la Unidad 15, el Complejo Térmico de Tocopilla seguirá operando a través de la Unidad 16, ciclo combinado que funciona a gas y 3 TGs.
Avances en energía renovable
En abril de 2021 la compañía anunció un completo plan de transformación que considera la salida total del carbón y el desarrollo de renovables en Chile por un total de 2.000
MW, lo cual contempla una inversión superior a US$ 1.500 millones y que significará una reducción de 80% de las emisiones de C02.
Parte de los avances de este compromiso fueron la conexión al sistema del Parque Eólico Calama (151 MW) en octubre del 2021 y del Parque Solar Tamaya (114 MWac) en febrero pasado; ambos ubicados en la región de Antofagasta.
Además, actualmente se encuentran en su última etapa los proyectos solares Coya (180 MWac) y Capricornio (88 MWac). De esta forma, la compañía contará con una capacidad instalada de energía renovable de 682 MW.
Por último, la compañía se encuentra desarrollando una seria de iniciativas de generación de energía renovable a lo largo del país, así como de hidrógeno verde y también de infraestructura en transmisión para entregarle solidez al sistema.