El cráneo del expresidente Mariano Melgarejo, quien gobernó Bolivia de 1864 a 1871 (y dentro de cuya gestión se llevó a cabo la fundación de Antofagasta en 1868) es venerada como reliquia milagrosa en la parroquia de San Pedro de Tarata, en Cochabamba.
Según el medio de historia regional DonCaliche.com, la osamenta que aún conserva (y según testimonios), le sigue creciendo el pelo y la barba yace resguardada por un cubo de cristal, en donde incluso se puede apreciar el agujero producto del tiro que le quitó la vida el 23 de noviembre de 1871, cuando este contaba con 51 años.
La macabra pieza fue inhumada de su sepultura en Lima en 1994 por un ciudadano de Tarata, localidad de la cual era originario el mandatario, considerando que estaría mejor resguardada entre sus conciudadanos.
Sobre este hecho, el investigador e historiador boliviano Maurice Cazorla cuenta que “cuando fue asesinado Melgarejo por su cuñado en Lima en 1871, lo enterraron en el cementerio de esa ciudad. En la década de los noventa un ciudadano de Cochabamba fue en busca del cuerpo, lo halló y lo exhumó. Solo pudo traer el cráneo que aún conservaba la barba y el balazo en la frente. Lo llevaron a Tarata, lugar donde nació”.
Cazorla además explica que, pese a que la pieza es exhibida a los visitantes “goza de respeto y veneración de esa población. Incluso hay un monumento de él. Solo se conservó el cráneo porque el cuerpo lo tuvieron que incinerar en Lima”.