Cada 13 de enero se conmemora el Día Mundial contra la lucha de la Depresión, una fecha instaurada desde 2004 para visibilizar esta enfermedad que afecta la salud mental de millones de personas a nivel global. Esta instancia busca concientizar sobre la importancia de su prevención, diagnóstico temprano y tratamiento adecuado.
La depresión es un trastorno mental caracterizado por una sensación persistente de tristeza, pérdida de interés o placer en actividades cotidianas, falta de energía, problemas para dormir y cambios en el apetito, entre otros síntomas.
Barbara Barriga, Psicóloga de clínica Andes Salud El Loa, explica que la Depresión “puede afectar la capacidad de las personas para trabajar, estudiar o relacionarse, y, en casos graves, puede derivar en ideaciones suicidas”.
Una realidad preocupante
Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 3,8% de la población mundial experimenta depresión, incluidos el 5% de los adultos y el 5,7% de los mayores de 60 años. En total, se estima que alrededor de 280 millones de personas sufren esta enfermedad.
En Chile, el panorama también es alarmante. De acuerdo con el último estudio “Termómetro de la Salud Mental en Chile ACHS-UC” publicado a fines de 2024, cerca de 2 millones de adultos presentan síntomas de depresión, lo que equivale a una de cada siete personas.
“Es fundamental entender que la depresión no distingue edad, género o situación socioeconómica, aunque las mujeres y los adultos mayores tienden a ser los más afectados”, destaca Barriga.
Síntomas, causas y tipos de depresión
Los principales síntomas de la depresión incluyen:
- Pérdida de interés en actividades diarias.
- Alteraciones en el sueño (insomnio o hipersomnia).
- Cambios en el apetito.
- Fatiga constante.
- Dificultad para concentrarse.
- Pensamientos recurrentes de muerte o suicidio, en casos más graves.
Las causas de la depresión pueden ser multifactoriales, incluyendo aspectos biológicos, psicológicos y sociales. “Eventos traumáticos, como la pérdida de un ser querido, problemas financieros, rupturas familiares o el aislamiento, pueden ser detonantes importantes. Además, existen factores genéticos y desequilibrios químicos en el cerebro que también influyen”, agrega la psicóloga.
En cuanto a las tipologías, se identifican distintas formas de depresión, como el trastorno depresivo mayor, el trastorno distímico y la depresión posparto.
Prevención, tratamiento y cuidado personal
La especialista enfatiza en que la prevención de la depresión pasa por adoptar hábitos saludables, como:
- Mantener una rutina de sueño adecuada.
- Realizar actividad física regularmente.
- Establecer conexiones sociales positivas.
- Gestionar el estrés a través de técnicas como la meditación o el mindfulness.
- Acudir a terapia psicológica cuando sea necesario.
El cuidado personal tambiénpuede ser clave en el manejo de los síntomas de la depresión, así como en el fomento del bienestar general, indica la profesional.
¿Qué puede hacer el paciente?
- Tratar de seguir haciendo cosas que solía disfrutar
- Mantener el contacto con amigos y familia
- Hacer ejercicio a menudo, aunque solo sea dar un paseo
- Seguir, si es posible, unos hábitos alimenticios y de sueño regulares
- Evitar o reducir el consumo de alcohol y no consumir drogas ilícitas, que pueden empeorar la depresión
- Contarle a alguien de confianza cómo se siente
- Acudir a un proveedor de atención de salud.
Si el paciente tiene pensamientos suicidas:
- Recordar que no está solo, que muchos han pasado por esto y encontraron ayuda.
- Contar a alguien de confianza cómo se siente
- Hablar con un trabajador de la salud (un médico, especialista o un consejero)
- Unirse a un grupo de apoyo.
Si la familia o gente cercana al paciente cree que existe el peligro de que, a corto plazo, pueda hacerse daño, es fundamental ponerse en contacto de inmediato con un servicio de emergencia o con una línea de atención telefónica para situaciones de crisis.
“El diagnóstico temprano es clave para evitar que la enfermedad se agrave. Una evaluación psicológica detallada, realizar controles de salud física y mantener al día los controles médicos de enfermedades físicas diagnosticadas, permite identificar los síntomas y determinar el tratamiento adecuado”, señala la psicóloga. Entre los tratamientos recomendados destacan la terapia cognitivo-conductual, la terapia farmacológica y, en algunos casos, una combinación de ambas.
Una llamada a la acción
La psicóloga de Andes Salud subraya la importancia de romper el estigma asociado a la salud mental: “Hablar sobre la depresión, reconocer los síntomas y buscar ayuda son los primeros pasos para superarla. No debemos olvidar que esta enfermedad tiene tratamiento y que, con el apoyo adecuado, es posible recuperar la calidad de vida”.
En el marco del Día Mundial de la Depresión, Andes Salud renueva su compromiso con la salud mental de sus pacientes, recordando la relevancia de buscar ayuda profesional y fomentar el cuidado emocional como parte integral del bienestar.