Un innovador proyecto tecnológico para la producción de nanopartículas de cobre,
empleando gases de un proceso pirolítico como agente reductor y su posterior
aplicación como antimicrobiano en material plástico usado a nivel industrial o
espacios y utensilios de salud, busca desarrollar la Universidad de Concepción
desde su Unidad de Desarrollo Tecnológico (UDT), en alianza con Nano2 Chile,
organización local que impulsa la aplicación de soluciones nanotecnología para la
industria y la minería en la provincia El Loa.
Actualmente el proyecto fue presentado al Fondo de Fomento al Desarrollo
Científico y Tecnológico (FONDEF), lo que abre fundadas expectativas a los
directores de la UDT. En tal sentido, el ingeniero de proyectos de la UDT, Cristian
Miranda, sostiene que el valor de la investigación “reside en el uso de desechos
provenientes de la industria forestal y el desarrollo para un nuevo uso de
nanopartículas de cobre -producto con identidad nacional- además de la aplicación
de la capacidad biocida del cobre en el desarrollo de materiales para uso
antibacteriano”.
Los resultados de la postulación se sabrán en septiembre y de ser adjudicado el
fondo, la investigación se iniciaría en 2022. El desarrollo contempla dos etapas, la
primera ligada a la preparación y caracterización (tamaño) de las nanopartículas y
la segunda es de aplicación, fase en que intervienen profesionales de Nano2 Chile
y Sylex Biomédica, empresa nacional especializada en la provisión de insumos
médicos, que también va como aliada en el proyecto.
Víctor Ferrer, ingeniero de proyectos de la UDT, señaló que ir de la mano con
empresas es una alianza fundamental, pues, “sin su apoyo podemos lograr un
aporte científico, pero la idea es que se aplique a nivel industrial. No sacamos
nada con tener un logro científico si no beneficia a una colectividad y en ese
aspecto, empresas como Nano2 Chile son el puente para lograr ese objetivo”.
Bajo esta mirada, Domingo Cánepa, Gerente de desarrollo de Nano2 Chile,
destacó la alianza con la Unidad de Desarrollo Tecnológico, ubicada en Coronel,
pues indicó que de ser ejecutado, “el proyecto busca en el corto plazo tener
productos comerciales tanto en el área industrial, como es el caso de Nano2 Chile
y en el área de la salud” y de esa forma hacer que la investigación científica tenga
asegurada su etapa de aplicación y en definitiva sea un beneficio directo para la
comunidad.
Cristian Miranda, ratificó que Chile tiene una gran falencia y es que la
investigación básica queda en el laboratorio de la universidad. Por otro lado, la
industria no hace investigación por lo oneroso de la inversión. “Por tanto, este tipo
de proyectos, en que empresa y universidad van de la mano, es una estrategia
fundamental para que la investigación se desarrolle y no quede entre cuatro
paredes, sino pueda ver la luz y se aplique”, planteó.