Francisco y Carolina Navarrete, son dos hermanos calameños que viven una compleja situación. Y es que, hace 10 años tienen problemas con su casa, al extremo de que el domicilio se está derrumbando de a poco.
Carolina explicó que es una situación que traspasa por años y que el Servicio de Vivienda y Urbanización (SERVIU), no quiso dar solución. “Por motivos de garantía, según ellos (SERVIU), ya no se podía hacer nada. Mi mamá con varios vecinos realizaron una demanda contra ellos y la perdieron”, manifestó.
Los últimos días la problemática se ha intensificado, “anoche se revenatron los vidrios, los bloques se están cayendo de a pedazos, las puertas no cierran, las paredes estan abiertas y se ve para afuera, se entra el viento. Se nos rompieron las cañerías anoche y desde Aguas Antofagasta nos dijo que debíamos salir de aquí”, añadió la afectada de la situación.

Sobre la ayuda que han recibido, la dueña del mueble comentó que en primera instancia fueron a la Municipalidad de Calama, desde ahí los mandaron hasta Dideco, para posteriormente decirles que debían dirigirse hasta el Seremi de Vivienda, en donde deben realizar un informe para enviar al Serviu, y son estos últimos quienes deben hacerse responsables para poder adquirir una vivienda o una ayuda económica mientras se soluciona el problema.
Por su parte, Francisco recalcó que no son los únicos afectados por esta situación, “por ejemplo, el vecino de al lado es uno de los más afectados en conjunto de nosotros. Anoche se quedaron encerrados y tuvimos nosotros que ir a abrirles las puertas. Estuvieron hasta muy tarde tratando de arreglar para que cerraran bien”, indicó.
Por último señalaron que hace un par de años, Serviu tuvo que demoler un aproximado de seis casas porque no pudieron ser arregladas en su debido tiempo.