En una emotiva ceremonia realizada en el corazón del histórico campamento, Codelco y las agrupaciones patrimoniales rindieron homenaje a quienes encarnan los valores, la memoria y el espíritu de Chuquicamata, en el marco de la conmemoración de los 110 años del mineral.
La actividad, que estuvo encabezada por el gerente general de la División, René Galleguillos Pallauta; el gerente de Operaciones, Marcos Neghme, y el gerente de Sustentabilidad de las Operaciones Norte de Codelco, Fernando Promis, reunió a representantes de agrupaciones y corporaciones vinculadas a Chuquicamata, así como a trabajadoras, trabajadores, exhabitantes e instituciones que mantienen viva la identidad chuquicamatina.
“Cada área de trabajo, cada calle, cada casa y cada rincón del campamento guarda una historia. Aquí habitaron mujeres y hombres que, con esfuerzo, cariño y compromiso, forjaron una comunidad única, solidaria y entrañable. Hoy queremos homenajear ese legado”, señaló René Galleguillos. En la ocasión, se hizo entrega de un reconocimiento especial, simbolizado en un casco con el nombre respectivo y un galvano, a organizaciones y personas destacadas como embajadoras y embajadores de los 110 años de Chuquicamata, distintivo del legado humano y social que ha caracterizado a esta comunidad minera por más de un siglo.
“Estoy emocionada, un poquito nerviosa, porque nos pilló de sorpresa. No pensábamos tener este bonito premio. A pesar de que, en realidad, durante todos estos años, hemos estado juntos a muchas, muchas generaciones, ayudando en carros alegóricos, alimentando a los niños cuando jugaban, cantando, disfrazándonos. En todo un poquito”, señaló Rosa Gallardo, esposa de Sergio Baldecchi, quienes fueron reconocidos por su aporte social a través de la agrupación “¿Cuál e’el problema?”.
El evento no solo destacó la trayectoria de las instituciones aún vigentes y activas que nacieron al alero del campamento, sino también el compromiso de las personas que, desde distintos ámbitos, han contribuido a preservar la memoria viva de Chuquicamata y proyectar su historia hacia las nuevas generaciones.
“Nuestra pastelería tiene más de 35 años, toda una generación. Niños que antes compraban tortas, ahora van como padres a comprar tortas para sus hijos. Por eso es un orgullo para mí estar acá en este momento recibiendo este premio para mi padre”, manifestó Roxana González, hija de Mario González, el reconocido emprendedor de la Pastelería La Americana.
El mismo sentimiento expresó Raúl Sepúlveda, ex alumno de la Escuela Industrial San José y trabajador de Codelco: “Orgulloso que me reconozcan en vida los años que llevo acá en Chuquicamata. Nacido y criado en Chuquicamata.
Hijo de trabajador de Chuqui por 35 años, y yo también llevo actualmente 35 años en la División”. Por su parte, las hermanas, Marina, Loreto y Diana Ibañez, hijas del ex trabajador chuquicamatino César Ibañez, recibieron emocionadas el reconocimiento póstumo a su padre por su destacada contribución a la vida social y cultural del campamento y la División.
“Las tres coincidimos en que lo que más sentimos es orgullo por lo que él hizo, y que gracias a lo que él hizo la gente lo reconoce y por eso lo recuerdan y lo postulan a pesar de que ya no esté, lo siguen recordando porque dejó huella”, destacó Loreto.
Las personas destacadas como embajadores(as) fueron: Gustavo Cuello Salinas, Amanda Fritis Soto, Abel de la Cruz Alfaro, Carolina Rojas, Celso Torres Mora, Sandra Berna Martínez, Pedro Espinoza, Arturo Barraza Díaz, Camila de la Jara, Andrea Gómez, Jaime Prado Trejo, Ever Díaz Vega, Patricia Leiva, Sergio Baldecchi Madariaga, Rosa Gallardo Gómez, Juan Maldonado Meza, Raúl Sepúlveda Ardiles, Sergio Muñoz Ramos, Melquiades Chávez Albanez, Abel Oro Álvarez, Mario González Martínez, Rosalía Arenas Ramírez, Patricio Torreblanca Piñones (póstumo), César Ibáñez Donoso (póstumo), Mario González González, Claudio Lira Solas, Eduardo Lira Solas, Jorge Lira Solas y Olivia Valdés Zapata.
Mientras que el reconocimiento a organizaciones destacadas que siguen activas recayó en: Centro Hijos de Andacollo de Chuquicamata, Corporación de la Mujer Trabajadora del Cobre (Cormutrac), Club de Golf Río Loa, Asociación Atlética de Chuquicamata, Sexta Compañía del Cuerpo de Bomberos de Calama (ex “Bomba de Chuquicamata”), Asociación de Fútbol Amateur de Chuquicamata, Radio El Loa, Escuela Industrial San José y Rotary Club Chuquicamata.
Con este homenaje, Codelco reafirma su compromiso con las raíces y el patrimonio intangible de Chuquicamata, valorando a las personas que han dado forma a una historia colectiva construida con orgullo, identidad y sentido de pertenencia.